Pero todo eso sirve como excusa para montar una película de acción disfrazada de denuncia muy bien llevada. El tandem formado ya con la serie Bourne demuestra que funciona a la perfección. El director hace buen uso de la cámara en mano sin hacerse ésta repetitiva y pesada mientras que el actor -lejos del papel del superagente secreto Bourne- ejecuta a la perfección su personaje.
Los secundarios son más que correctos aunque me gustaría destacar a la actriz que hace de periodista -cuyo nombre ni me acuerdo ni voy a buscar-.
La historia trata sobre el Sr. Miler que con su comando -batallón, o lo que sea- se dedican a buscar las armas de destrucción masiva mientras se invade Iraq. Claro está no encuentran nada y esto cada vez mosquea más al jefe Miler. Pero la verdad está por descubrir y el político de turno pretende ocultarla sobre el cadáver de quien sea. Una historia creada al parecer en un libro que bien podría ser verdad.
En total son 100 minutos que pasan como un soplido con un ritmo que jamás decae. A lo largo del metraje consiguen que nos identifiquemos cada vez más con el personaje y eso -salvo raras ocasiones- actualmente rara vez ocurre en un film de este tipo.
Sin embargo esta película acción-denuncia hubiera estado mejor rodada hace 5 años, por ejemplo. Ahora todo el mundo se apunta al carro de criticar una guerra que antes todo EEUU apoyaba. Salvo esta salvedad -y sobre todo si eres uno que sabía de las mentiras de los dirigentes de entonces- creo que la película no defrauda a nadie.
Por cierto el título hace referencia a una zona protegida en Bagdad en donde los turistas aún veraneaban mientras caían bombas al otro lado. Curioso ¿verdad?
1 comentario:
La tengo pendiente de ver así que no me leo la reseña pero eso de una de las mejores películas bélicas me ha sonado muy bien.
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