jueves, 4 de noviembre de 2010

Pesadilla en Elm Street, El Origen

El origen del tedio.

Pues sí, porque no llega ni a la suela del zapato a la primera película. Vamos, creo que ni a la de la última película -y eso es decir mucho-. Te pueden gustar o no este tipo de películas pero se presupone que cuando te gastas los euros para apoltronarte en la sala y ver esta película es que te gustan. Por lo tanto esperas -si no has visto las anteriores- una decente película de terror con una historia más o menos decente que te asuste y sobre todo, sobre todo, un malo malísimo que merezca la pena.
No hablaré del guión para masacrarlo porque sinceramente creo que no es malo, aunque padece de un gran fallo. Pero pese a ese fallo el resto del guión es bueno. La historia es buena y todo está bien planteado dándonos los detalles del asunto en su momento y todo eso. ¡Pero es que el fallo es tan grave! ¿Os acordáis de aquel hijo de perra con la cara quemada, sombrero raído, cuchillas en los dedos y mala ostia? ¿Recordaís sus sarcásticos comentarios? ¿Su humor negro? ¿Su sonrisa cuando mataba a sus víctimas? Pues esto último que hacía de él algo diferente ha desaparecido totalmente. Como si al Jocker le hubieran borrado su sonrisa de un plumazo y esa locura tan especial en la última de Batman. Así que tenemos el mismo atrezo pero distinto personaje. Y sintiéndolo mucho Freddy Krueger es el alma de la fiesta. Sin él -el anterior- no hay fiesta. No hay película, no hay nada por lo que merezca ver una película que lleve las palabras "pesadilla" y "Elm Street" en su título. Es una pena porque el guión estaba lleno de aciertos y guiños a los fans. Como la escena de la bañera famosa, o la muerte de la rubia en su habitación -es casi calcada, aunque con mejores efectos, a la de la primera película-.
De los actores tampoco hay que hablar mucho. Quizás en un futuro sean gente famosa como le pasó al señor Deep en la primera de la saga. ¿Dónde está Robert Englud? Desde la primera aparición de Freddy que lo he echado a faltar.
Del director sólo un apunte. Espero que nadie arriesgue dinero ofreciéndole rodar una película de terror. Algo que todo el mundo sabe es que las películas de genero deben de tener siempre una buena atmósfera. Una música acorde a la situación que es la que realmente predispone al espectador a que lo pase mal. Aquí, por este defecto, nos encontramos con una película de terror desangelada. Sin emoción alguna.
En resumen: Sólo para fans incondicionales de la saga, y por curiosidad. Os aseguro que para mí a sido toda una desilusión. No sé, tenía esperanzas en este título. ¡Coño si me gusto más la de Freddy Vs. Jackson! 

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