El Hobbit: Un viaje inesperado

No sé cuando publicaré este post pero ayer (viernes 14 de diciembre) pude acudir al estreno de la película más esperada por mí este año -sí, más que Los Vengadores-. Tuve la suerte de poder disfrutar durante 170 minutos de una obra de arte cinematográfica. Una dirección estupenda que, pese a toda la tecnología nueva de las 3D y HFR (la de 48 fps en lugar de 24), se ha basado en hacer buen cine para el espectador y no buen cine para las 3D o HFR. ¿A quién no le ha resultado evidente en esas películas de nueva hornada tal toma o tal otra toma creada especialmente para el 3D dichoso? Pues aquí no veremos nada parecido. Ni falta que hace. 

Tras elogiar al director -y de paso también a Guillermo del Toro por compartir autoría en el screenplay- daré una breve descripción de los actores... geniales. Pese a que en algunas tomas resulta evidente la avanzada edad de Gandalf frente a las películas de LOTR (que en teoría transcurren 60 años después) esos detalles se quedan en nada tras la cortina de una excelente actuación por parte de todo el elenco. Por cierto, aquí Galadriel sí que aparece realmente hermosa.

En cuanto a técnicamente he de decir que la he visto en digital, sin 3D ni HFR, y quizás por eso algunos travelings se vuelven borrosos hasta la estabilización de la cámara -sobre todo los iniciales-. Sin embargo, aunque jode en pantalla grande, es cosa de un momentito y luego enseguida podemos disfrutar de los excelentes efectos especiales de Weta, tanto digitales como los clásicos. ¿Alguién duda de que Weta es ahora lo que fue Industrias Light & Magic en su tiempo? El arte de estos señores, solo en esta película, nos ha traído escenas que se nos quedarán en la retina por muchos años. Como la batalla de gigantes de las montañas. O las cuevas de los trasgos, o su mismo rey...

¡¡¡TROLS!!!

Pero la historia... ay que ese es su punto peliagudo. Su talón de aquiles. Si algo se le puede reprochar a esta película (y por extensión a la nueva trilogía entera) es su ambición. Su ambición a repetir un fenómeno igual al que fue LOTR en su día. Hacer dos películas de un libro de pocas páginas -y de marcado enfoque más infantil- ya parecía difícil, ¿pero tres? Pues eso se ha conseguido sacando historias de debajo de las piedras -auténticas y nuevas- que complementan a la original (incluso la modifican en algunos aspectos) y añaden una visión más épica y completa al mundo de La Tierra Media y su extraña compañía. Esto será algo que a los más puritanos seguidores fanáticos de Tolkien les dolerá, les pinchará hasta el hueso y luego les hará vomitar. Pero luego esos mismos seres podrán comprobar que pese a esa licencia la película (de las otras dos no podemos hablar todavía) sigue y embellece el libro original con gran respeto y esmero; con una historia cuidada, bien trazada y maravillosamente narrada.

Así pues, y resumiendo un poco, nos encontramos ante una muy buena película que nos ofrecerá el cuento clásico que conocemos mejorado (sí, perdónenme por decirlo publicamente), ampliado y magníficamente plasmado en el celuloide. Volveremos a ver a los orcos, wargos, trasgos (primoshermanos de los de Moira), al repugnante hobbit Smeagol y tantos otros... incluído Saruman. Mi recomendación está clara ¿no? Verla, si  vais a ir al cine este mes (o al que viene, o al otro) esta es la película que hay que ver.

PD: Para los curiosos como yo no hay escena ni trailer ni nada tras los créditos finales. Por lo menos en mi cine no los hubo.

Ya tengo ganas de ver la versión extendida ¿por qué habrá una versión extendida, verdad?