Francotirador

Edificio sitiado.

Con una idea interesante la película nos ofrece un cúmulo de despropósitos y hechos increíbles que ni el más cenizo de los cenizos puede creerse. Quizás por ello nos alerta al comienzo que la sociedad está jodida y tal y tal.

La historia gira en torno a un francotirador que se le ocurre "castigar" a una comunidad de un edificio disparando con espantosa puntería y rapidez a todo aquel ser viviente que aparezca por las ventanas. El problema es que simplemente no te lo crees. Parece que en todo el edificio solo existen los inquilinos que nos muestran como coprotagonistas de uno de los rellanos (ya no recuerdo que piso). El resto de viviendas deben de estar vacías. Que yo sepa tampoco nos explican dicha ausencia.

Personalmente, además, se me ocurren varias formas diferentes de escapar de la mira del enemigo.

Los actores no es que se luzcan que digamos y el director cumple como puede. Mas ni siquiera la supuesta sorpresa final con la identidad del tirador salva el cuadro.

Lo mejor: las muertes con cierto toque gore y la sorprendente certeza y rapidez del tirador.

Lo peor: haber perdido horas de sueño con esto.

En resumen: para ver un día que no sepas que hacer y poderte dormir sin remordimientos por perdértela.